Génesis (50:22-26): «Y llevaréis mis huesos de aquí»


Y José se quedó en Egipto, él y la casa de su padre; y vivió José ciento diez años. Y vio José la tercera generación de los hijos de Efraín; también los hijos de Maquir, hijo de Manasés, nacieron sobre las rodillas de José. Y José dijo a sus hermanos:
—Yo voy a morir, pero Dios ciertamente os cuidará y os hará subir de esta tierra a la tierra que Él prometió en juramento a Abraham, a Isaac y a Jacob.
Luego José hizo jurar a los hijos de Israel, diciendo:
—Dios ciertamente os cuidará, y llevaréis mis huesos de aquí.
Y murió José a la edad de ciento diez años; y lo embalsamaron y lo pusieron en un ataúd en Egipto.

Fin del Génesis


Fotografía: Kai Hirai – Anterior (50:15-21): «Proveeré para vosotros y vuestros hijos» – Inicio del Génesis – Diccionario y sumario del Génesis.


Génesis (50:15-21): «Proveeré para vosotros y vuestros hijos»


Al ver los hermanos de José que su padre había muerto, dijeron:
—Quizá José guarde rencor contra nosotros y nos devuelva todo el mal que le hicimos.
Entonces enviaron un mensaje a José, diciendo:
—Tu padre mandó antes de morir, diciendo: «Así diréis a José: Te ruego que perdones la maldad de tus hermanos y su pecado, porque ellos te trataron mal». Y ahora, te rogamos que perdones la maldad de los siervos del Dios de tu padre.
Y José lloró cuando le hablaron. Entonces sus hermanos se postraron delante de él y dijeron:
—He aquí, somos tus siervos.
Pero José les dijo:
—No temáis, ¿acaso estoy yo en lugar de Dios? Vosotros pensasteis hacerme mal, pero Dios lo tornó en bien para que sucediera como vemos hoy, y se preservara la vida de mucha gente. Ahora pues, no temáis; yo proveeré para vosotros y para vuestros hijos.
Y los consoló y les habló cariñosamente.


Fotografía: Hossein Zare – Anterior (50:1-14): «Los egipcios lo lloraron setenta días» – Siguiente (50:22-26): «Y llevaréis mis huesos de aquí» – Inicio del Génesis – Diccionario y sumario del Génesis.


Génesis (50:1-14): «Los egipcios lo lloraron setenta días»


José se echó sobre el rostro de su padre, lloró sobre él y lo besó. Y ordenó José a sus siervos médicos que embalsamaran a su padre; y los médicos embalsamaron a Israel. Y se requerían cuarenta días para ello, porque este es el tiempo requerido para el embalsamamiento. Y los egipcios lo lloraron setenta días.
Y cuando pasaron los días de luto por él, habló José a la casa de Faraón, diciendo:
—Si he hallado ahora gracia ante vuestros ojos, os ruego que habléis a Faraón, diciendo: «Mi padre me hizo jurar, diciendo: He aquí, voy a morir; en el sepulcro que cavé para mí en la tierra de Canaán, allí me sepultarás». Ahora pues, te ruego que me permitas ir a sepultar a mi padre, y luego volveré.
Y Faraón dijo:
—Sube y sepulta a tu padre como él te hizo jurar.
Entonces José subió a sepultar a su padre, y con él subieron todos los siervos de Faraón, los ancianos de su casa y todos los ancianos de la tierra de Egipto, y toda la casa de José, y sus hermanos, y la casa de su padre; solo dejaron a sus pequeños, sus ovejas y sus vacas en la tierra de Gosén. Subieron también con él carros y jinetes; y era un cortejo muy grande. Cuando llegaron hasta la era de Atad, que está al otro lado del Jordán, hicieron allí duelo con una grande y dolorosa lamentación; y José guardó siete días de duelo por su padre. Y cuando los habitantes de la tierra, los cananeos, vieron el duelo de la era de Atad, dijeron:
—Este es un duelo doloroso de los egipcios.
Por eso llamaron al lugar Abel-mizraim144, el cual está al otro lado del Jordán. Sus hijos, pues, hicieron con él tal como les había mandado; pues sus hijos lo llevaron a la tierra de Canaán, y lo sepultaron en la cueva del campo de Macpela, frente a Mamre, la cual Abraham había comprado de Efrón, junto con el campo para posesión de una sepultura. Y después de sepultar a su padre, José regresó a Egipto, él y sus hermanos, y todos los que habían subido con él para sepultar a su padre.

144Abel-mizraim: lugar situado al este del río Jordán, llamado anteriormente era o llanura de Atad, donde José y sus hermanos lloraron a Jacob antes de llegar a Hebrón.


Fotografía: Nathan Wirth – Anterior (49:28-33): «Expiró y fue reunido con su pueblo» – Siguiente (50:15-21): «Proveeré para vosotros y vuestros hijos» – Inicio del Génesis – Diccionario y sumario del Génesis.


Génesis (49:28-33): «Expiró y fue reunido con su pueblo»


Todas estas son las doce tribus de Israel, y esto es lo que les dijo su padre cuando los bendijo. A cada uno lo bendijo con la bendición que le correspondía. Después les ordenó y les dijo:
—Voy a ser reunido a mi pueblo; sepultadme con mis padres en la cueva que está en el campo de Efrón el hitita, en la cueva que está en el campo de Macpela que está frente a Mamre, en la tierra de Canaán, la cual Abraham compró juntamente con el campo de Efrón para posesión de una sepultura. Allí sepultaron a Abraham y a su mujer, Sara; allí sepultaron a Isaac y a su mujer Rebeca, y allí sepulté yo a Leah. El campo y la cueva que hay en él fueron comprados a los hijos de Het.
Cuando Jacob terminó de encargar estas cosas a sus hijos, recogió sus pies en la cama y expiró, y fue reunido con su pueblo.


Fotografía: Mauro Maione – Anterior (49:1-27): «Escuchad lo que ha de acontecer» – Siguiente (50:1-14): «Los egipcios lo lloraron setenta días» – Inicio del Génesis – Diccionario y sumario del Génesis.


Génesis (49:1-27): «Escuchad lo que ha de acontecer»


Entonces Jacob llamó a sus hijos, y dijo:
—Reuníos para que os haga saber lo que os ha de acontecer en los días venideros. Juntaos y oíd, hijos de Jacob, y escuchad a Israel, vuestro padre.
»Rubén, tú eres mi primogénito, mi poderío y el principio de mi vigor, prominente en dignidad y prominente en poder. Incontrolable como el agua, no tendrás preeminencia, porque subiste a la cama de tu padre, y la profanaste: él subió a mi lecho.
»Simeón y Leví son hermanos; sus armas, instrumentos de violencia. En su consejo no entre mi alma, a su asamblea no se una mi gloria, porque en su ira mataron hombres, y en su obstinación desjarretaron bueyes. Maldita su ira porque es feroz; y su furor porque es cruel. Los dividiré en Jacob, y los dispersaré en Israel.
»A ti, Judá, te alabarán tus hermanos; tu mano en la cerviz de tus enemigos; se inclinarán ante ti los hijos de tu padre. Cachorro de león es Judá; de la presa, hijo mío, has subido. Se agazapa, se echa como león, o como leona, ¿quién lo despertará? El cetro no se apartará de Judá, ni la vara de gobernante de entre sus pies, hasta que venga Siloh142, y a él sea dada la obediencia de los pueblos. Él ata a la vid su pollino, y a la mejor cepa el hijo de su asna; él lava en vino sus vestiduras, y en la sangre de las uvas su manto. Sus ojos están apagados por el vino y sus dientes blancos por la leche.
»Zabulón habitará a la orilla del mar; y él será puerto para naves, y su límite será hasta Sidón143.
»Isacar es un asno fuerte, echado entre los apriscos. Al ver que el lugar de reposo era bueno y que la tierra era agradable, inclinó su hombro para cargar, y llegó a ser esclavo en trabajos forzados.
»Dan juzgará a su pueblo, como una de las tribus de Israel. Sea Dan serpiente junto al camino, víbora junto al sendero, que muerde los jarretes del caballo, y cae su jinete hacia atrás. ¡Tu salvación espero, oh Señor!
»A Gad salteadores lo asaltarán, mas él asaltará su retaguardia.
»En cuanto a Aser, su alimento será sustancioso, y él dará manjares de rey.
»Neftalí es una cierva en libertad, que pronuncia palabras hermosas.
»Rama fecunda es José, rama fecunda junto a un manantial; sus vástagos se extienden sobre el muro. Los arqueros lo atacaron con furor, lo asaetearon y lo hostigaron; pero su arco permaneció firme y sus brazos fueron ágiles por las manos del Poderoso de Jacob (de allí es el Pastor, la Roca de Israel), por el Dios de tu padre que te ayuda, y por el Todopoderoso que te bendice con bendiciones de los cielos de arriba, bendiciones del abismo que está abajo, bendiciones de los pechos y del seno materno. Las bendiciones de tu padre han sobrepasado las bendiciones de mis antepasados hasta el límite de los collados eternos; sean ellas sobre la cabeza de José, y sobre la cabeza del consagrado de entre tus hermanos.
»Benjamín es lobo rapaz; de mañana devora la presa, y a la tarde reparte los despojos.

142Siloh: término que significa ‘descanso’ o ‘paz’ y que Jacob utiliza para referirse al Mesías. 143Sidón: una de las principales ciudades fenicias, entre Beirut y Tiro, en la costa del Mar Superior (Mediterráneo).


Fotografía: Michael Levin · Cartografía: Las doce tribus de Israel – Anterior (48:17-22): «Te doy la parte que tomé con mi espada y con mi arco» – Siguiente (49:28-33): «Expiró y fue reunido con su pueblo» – Inicio del Génesis – Diccionario y sumario del Génesis.