Don Quijote de la Mancha (1.ª parte, cap. II, 2) · Fotografía: Lewis W. Hine

Don Quijote de la Mancha (1605), de Miguel de Cervantes (cap. II, 2): «Que trata de la primera salida que de su tierra hizo el ingenioso don Quijote: Prosiguió su camino, sin llevar otro que aquel que su caballo quería»


Mas apenas se vio en el campo, cuando le asaltó un pensamiento terrible, y tal que por poco le hiciera dejar la comenzada empresa; y fue que le vino a la memoria que no era armado caballero y que, conforme a ley de caballería, ni podía ni debía tomar armas con ningún caballero, y puesto que lo fuera, había de llevar armas blancas3, como novel caballero, sin empresa en el escudo, hasta que por su esfuerzo la ganase. Estos pensamientos le hicieron titubear en su propósito; mas, pudiendo más su locura que otra razón alguna, propuso de hacerse armar caballero del primero que topase, a imitación de otros muchos que así lo hicieron, según él había leído en los libros que tal le tenían. En lo de las armas blancas, pensaba limpiarlas de manera, en teniendo lugar, que lo fuesen más que un armiño; y con esto se quietó y prosiguió su camino, sin llevar otro que aquel que su caballo quería, creyendo que en aquello consistía la fuerza de las aventuras.

3arma blanca: arma lisa, sin empresa pintada, que solo se ponía cuando el caballero se había hecho merecedor de ella por alguna proeza.


Fotografía: Lewis W. Hine – Anterior (cap. II, 1): «Se armó de todas sus armas con grandísimo contento» – Siguiente (cap. II, 3): «Dichosa edad y siglo dichoso» – Primera parte del Quijote – Diccionario y sumario del Quijote.